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| Patricia Cobello: con mucha actividad |
Aun
así, para el venidero martes (6), está fijada una sesión extraordinaria del
cuerpo parlamentario. El concejo abordaría, entonces, la consideración del
presupuesto de gastos y cálculo de recuerdos para el venidero ejercicio 2017. A
estar por algunos indicios, prosperaría la aprobación de ese documento
esencial, bien es cierto que se aguarda algún despacho en disidencia con los
proyectado por el ejecutivo. Se verá…
El
mismo martes (6), pero en otro orden se reunirá el consejo distrital del
Partido Justicialista, que preside la intendenta (MC) Patricia Cobello. La
convocatoria, en la unidad básica, está anunciada para las 20.30.
Si
de Patricia se trata, alguna versión indica que habría firmado el acuerdo con
el PAMI, que establece nuevas normas para el funcionamiento del sistema de los
médicos de cabecera. Y no sólo eso. En Mayor Buratovich estaría cobrando cuerpo
la construcción de la sede de la Asociación Médica de Villarino, que encabeza
la doctora Cobello.
En
otro orden de cosas, finalmente, el concejal Juan Cruz Vdal (Cambiemos) se
reunirá con el intendente municipal. El encuentro será este viernes (2), desde
la hora 9. Ya hemos comentado (incluso con el testimonio del propio “Colo”) la
agenda que se desplegaría en la ocasión.
El
tema de la provisión de agua a Médanos en el verano que se insinúa sería
dominante en las conversaciones entre el “verde número 1”, doctor Carlos
Bevilacqua; y el jefe del bloque amarillo (Vidal). Pero no será el único,
porque estarán la seguridad; la generación de nuevas fuentes de trabajo y el
archiconocido y demorado asunto de Villarino Patagonia Bonaerense.
No
sabemos si este es el lugar. Sí, en cambio, que no podemos sino dedicar unos
párrafos al recuerdo de Marcelo Telker, que dejó esta tierra en las últimas
horas y que, seguramente, por su fe, estará gozando ya de la gracia eterna, por
penosa que sea la mención de su fallecimiento.
Le
conocimos quizás tanto por nuestra tarea periodística como por nuestro fugaz
paso por algún cargo en el municipio de Villarino, en la década pasada.
Desde
uno u otro ángulo, supimos de su capacidad; de su contracción al trabajo; y,
muy encima de eso, de sus virtudes como buena persona, que le hizo granjearse
la consideración de cuantos tuvieron trato con él.
Sin
que haya lugar a la menor duda, Marcelo dejó huellas. Lo han expresado los
mensajes que la red social permitió conocer, de compañeros por un lado; y de los
amigos que se ganó.
Se
fue, impensadamente, generando verdadera congoja en los círculos a los que
estuvo ligado. Quedará su recuerdo…