Mostrando entradas con la etiqueta 150117 POSTALES. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta 150117 POSTALES. Mostrar todas las entradas

domingo, 15 de enero de 2017

JORGE SIMONI: UNA PASIÓN HECHA REALIDAD

El country Los Médanos, emprendimiento familiar en pleno desarrollo.

Hace años, muchos por cierto, que lo conocemos. Tantos que, a ciencia cierta, se nos escapa ya de cuántos hablamos.

Recordamos sí, algunos episodios. Alguna campaña, décadas atrás, buscando solución a un problema de vieja data que recién ahora parece encontrar una alternativa: el del agua, que espera, como a cada año, que alguna vez deje de ser una utopía eso del tantas veces anunciado acueducto desde el río Colorado. 

Cuando eso viene a la memoria, se nos asocia, inevitablemente, la figura de Don Luis (Di Nucci, ¿quién sino él?), junto a quién el protagonista de esta historia estaba enteramente ligado, en sueños, esfuerzos y vaya a saber cuántas ideas más.


Se nos presenta la imagen de la Cámara de Comercio e Industria, de la que fue presidente por varios años. No alcanzamos a definir el porqué, pero alguna vez, asamblea mediante, estuvimos en la CD de esa entidad, cuando los tiempos eran muy otros.

Sólo como apéndice, agregado entre tantas que pasaron, no pudimos olvidar nunca una campaña hecha, a pura voluntad y no mucho más, para que la escuela especial, de Médanos, tuviera el terreno donde construir su edificio. En pocas horas, usando como como eje su local comercial, el que fuera de Simoni y Mocciaro, hicimos por radio un movimiento. Y conseguimos lo que se busca.

Lo ubicamos, en ligero repaso como “vendedor” de autos (algo muy ligado a su afición por el deporte mecánico que supo tenerlo como participante, en alguna categoría que es largamente pasado.
Lo supimos metido de lleno con los materiales de construcción, a los que se dedicó en Médanos; también en Mayor Buratovich.

Habría muchas más cosas por decir.

Alguna vez, en los ’90, fue concejal. Y tras esa escala previa, llegó a ser, por 6 años (1999 a 2005), el intendente municipal de Villarino.

 Después, también, diputado provincial (2005/2009).


La “vuelta al llano”, sin embargo, no lo mantuvo inactivo, sino todo lo contrario. Es cierto que por dos veces buscó volver así despacho mayor de Moreno 41 de Médanos. No le alcanzó el respaldo de la gente que vio en él la esperanza de un mañana mejor para el distrito.

Mientras tanto, fue dando lugar a una ilusión de siempre, para convertirla en realidad. Así nació el Country Los Médanos, con todo el impulso de quien tenía, como él, muy en claro cuál era la meta.

Los años, que van pasando con el incesante avance de las agujas del reloj, fueron acuñando aquello que ha ido convirtiéndose en un símbolo de turismo lugareño y regional.

Como cumpliendo con una “deuda pendiente”, si cabe, estuvimos en ese lugar este sábado (14).

Buscamos la compañía de Remo Pasqualini, un amigo común, para llegarnos hasta la altura del kilómetro 737,5 de la ruta nacional número 22.
Almorzamos allí, por la hora en que llegamos (las 13), como para que no quedara duda de que “íbamos” no sólo a visitar el complejo. 

En ese momento, la mesa fue compartida, también, por Elsa Fernández, la “otra mitad” de quien era, obvio, el inequívoco personaje de un reportaje que duró exactamente 20 minutos.

Al citarla, no podemos olvidar cuántas veces almorzamos las milanesas que ella dejaba preparadas, junto a Sergio y Leo, muy chicos aun. 

No hablamos, salvo un par de preguntas y no mucho más, de política.

Sí, de algunos pormenores (del pasado) y algunos objetivos (de futuro) de una empresa eminentemente familiar, como bien lo explicó él mismo en algún momento de la charla.

Casi sería suntuario, innecesario o como quiera llamárselo, mencionar de quien y con quien hablamos. Simplemente, Jorge Simoni, el “Zorro”, de quien nos jactamos en ser amigos desde una pila de años.

Salvando las distancias de edad (10 años menos que los nuestros) y de trayectorias, nos une un denominador común: la tozudez para insistir, entre buenas y malas, con nuestros objetivos personales de toda una vida.

Aquí está el testimonio: