El nuevo caso de
coronavirus y otras yerbas…
Que no hace falta
demasiado para poner en evidencia las falencias de un gobierno está a la vista.
Parece ser que,
aunque se lo niegue, los parques eólicos se han constituido, un poco antes y un
poco después, un verdadero karma para el devenir de los mandatos del intendente
de Villarino.
En los primeros
cuatro años, “saltó a la luz” (no vamos a decirlo de otra forma, porque con eso
basta) el caso de los cánones que se percibían por “La Castellana”. Hubo
“amagos” de mostrar ese parque al periodismo, pero nunca lo hicieron.
Ni siquiera
ocurrió cuando lo inauguraron y hubo festín, incluso. No era algo municipal, el
acto, sino de la empresa que llevó a cabo el emprendimiento. Claro, el enlace,
para que el periodismo de Villarino estuviera presente en aquella ocasión debe
haber sido obra del “picasesos”. Todo dicho; ¿para qué abundar en detalles?.
Lo que sí podemos
decir es que, por aquellos tiempos, en ocasión de un diálogo (de los pocos),
con el lord menor de la comuna (lo de mayor, que se estila, le queda demasiado
grande), nos dijo que estaba al salir un dictamen del tribunal de cuentas de la
provincia, el que supuestamente convalidaría lo hecho por el municipio al
percibir el canon correspondiente al citado sistema de molinos de viento.
Parecería ser
que, pasando los meses, ese documento se lo llevaron los vientos que distinguen
al distrito.
Ahora, ya
segundo mandato del “manda menos”, otra
vez un parque de molinos intenta llevárselo puesto.
Y decimos esto
aunque los dichos del intendente (verborrágicos por demás, en un audio dirigido
a su “tropa”, pero viralizado para que se supiera de la gratuita ofensa a los
medios y a la gente en general) quieran suponer lo contrario.
Ocurre que por
razones casi obvias, se ha indicado que los dos casos de coronavirus
“pertenecen” a Bahía Blanca, porque allí residen los afectados. De igual modo,
podrían habérsele adjudicado a la provincia de Córdoba, porque los dos
empleados (de alguna de las 6 empresas -¿mucho no?- que trabajan en el predio)
son oriundos de aquel lugar.
Todo ese juego de
palabras (tomando algo del mencionado e indignante whatsapp) no pudo ser
obstáculo para dos hechos, irrebatibles: el lunes (11), el parque eólico tuvo
movimiento de máquinas (o sea, no estuvo clausurado); y este martes (13), se
registró un tercer caso de coronavirus, que afecta –está a estudio en Región
Sanitaria, se nos dijo– también a un trabajador del sistema de molinos en
construcción cerca de la localidad de Mayor Buratovich.
Este caso,
confirmado más allá del meridiano de la jornada, comprende a un hombre de 41
años, originario de la ciudad de Buenos Aires. Ergo, podría adjudicarse a la
ciudad autónoma o cercanías; y no específicamente a Villarino, en la data que
se ofrece por estos lados.
Eso no quita que
haya 6 casos de aislamiento y que esté trabajándose en ciertos cuidados en
Pedro Luro, Hilario Ascasubi y Mayor Buratovich, porque hay gente de esos
lugares involucrados en los trabajos del parque de molinos de viento.
Todo esto, dicho
un poco a manera de resumen de los rastros que la pandemia va dejando a su paso
por el partido de Villarino, sin dejar de tener presente que, a favor de la
temporada de zafra cebollera, sigan entrando y saliendo camiones (según nos
manifiestan desde la zona sur).
Y una acotación
final, antes que los de siempre empiecen a tejer, equivocadamente, sus
conjeturas: el tercer caso de coronavirus se ha prestado, más allá de lo dicho,
a confusiones (¡cuando no!): se aludió al tema pensando en un cuarto afectado,
asociándolo con el kilómetro 714 de la ruta nacional número 3. Nadie salió a
aclarar absolutamente nada. ¿Quién gana con ese alto grado de desinformación?.