¿Se acuerdan de Unión Pro?. ¿Alianza en ciernes, si
o no?. Alejamiento que preocupa al "massismo". Una “addenda” que merece cierta explicación (y
no del gobierno actual que la sacó a “relucir” tres años después). ¿Nunca más
se supo de la autopista informática?. “Mejor que decir es hacer”; mensaje
oficial con obras. ¿Radicales en dilemas?.
César Aldunate |
Como en esto de la política, sobre todo si se trata
de husmear en los antecedentes, cercanos o distantes (no importa demasiado, por
las constantes mutaciones que se dan), nos ha llamado la atención, y nobleza
obliga a decirlo en este caso, un apunte que, días atrás nos formuló un activo
militante joven.
Aunque el dato se suministraba en una “charla”, por
el canal privado del chat de las redes sociales, se nos ocurre interesante
comentarlo, intuyendo que (aunque la gente no sea afecta a proporcionar
demasiadas referencias, pero sí es rápida para criticar sin saber a veces de
qué se trata).
Aludía, esa especie, a que no es la primera vez que
“desembarca” el Pro en el distrito de Villarino, dicho esto, quizás, en
relación al reciente pronunciamiento de Jorge Simoni, potenciándose como
precandidato (debe sortear las PASO) a intendente municipal por el partido cuyo
líder es Mauricio Macri, jefe de gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires
y firme postulante al sillón mayor de la Casa
Rosada a partir del 10 de diciembre del año venidero.
Lo dicho por nuestro interlocutor no tiene que ver,
mayormente, con la aspiración del “Zorro” de volver a ubicarse en el despacho
de Moreno 41 de Médanos (que ocupó entre 1999 y 2005). Sí, en cambio, con la
suerte de anticipación que hubo, por aquí, respecto del título de la agrupación
que gobierna en la Capital Federal.
Hubo Unión Pro, efectivamente, en esa “melange”
entre el partido capitalino y otro que se sumó en el primer estado argentino,
como fue Unión Celeste y Blanco. Podemos no estar en lo cierto respecto a que
esa conjunción derivó en Unión Pro o algo por el estilo. Sí recordamos que en
su momento Carlos Bevilacqua anduvo con alguna boleta bastante afín en puja
electoral; se asoció como “pata peronista” a la fracción “K” que permitió la
elección del “no electo” anterior, en el 2007, y que llevó, de esa manera, al
hoy líder del “vecinalismo”, “massismo” o “renovadorismo”, a ocupar por algún
tiempo la presidencia del Honorable Concejo Deliberante.
Se recordará que dos ediles, cuyo mandato concluyó
en el 2011, Eva Elvira Nievas y Ricardo Balint, se quedaron con la “bancada” de
Unión Pro, tras la escisión. Y no tenemos ningún otro dato ilustrativo que nos
ayude a completar esa simple enunciación.
De todas formas, podría especularse con que el Pro
en proyección 2015 muy poco tiene que ver con una línea política que, al menos
a nivel de la “sexta”, no parece tener una identidad demasiado notoria. Y eso
abona la certeza de que el “Zorro”, con su indiscutido entusiasmo y carácter,
será quien motorice la perspectiva electoral del año que viene.
A propósito, dicen por ahí que en lo venidero
Mauricio andará por el sur provincial (Bahía Blanca esencialmente), quizás para
dar forma a su “tropa”, a la que no sería ajeno Héctor Gay, el ex periodista
devenido en parlamentario, con pretensiones de ser cabeza de ese movimiento, en
las cercanías, más allá de su eventual postulación Pro a la intendencia de
Bahía Blanca, tantas veces negada como acentuada. Fecha de la venida de Macri:
entre el 10 y el 15 de octubre.
En lo estrictamente lugareño y siempre hablando de
la huestes de Simoni, se sabe de gente que -por llamados, sms o mensajes del
Facebook- se ha manifestado adhiriendo a su postulación.
Lo que no puede certificarse aún (escurridizo el
joven cuando quiere) es si el escindido concejal de Acción por Villarino, ahora
edil del bloque unipersonal Integración
Vecinalista, ha formalizado su ingreso a una especie de alianza de esa novel
agrupación con la estructura del Pro distrital. Sólo alcanzamos a saber, sms
mediante, que Juan Cruz Vidal andaba, este miércoles (24), por Mayor
Buratovich. No es demasiado aventurado suponer que está trabajando para “sumar
gente” a su objetivo y que en “Burato”, presencia de Carla Donnari mediante,
debe estar una de las bases operativas del “colo”.
Un comentario al pasar, de mentideros claro, indicaba
que el alejamiento de quien fuera jefe del bloque (vecinalista, “massista” o
renovador, como quiera llamársele) preocupa un poco más de lo previsto a la
gente de (Carlos) Bevilacqua. Entre estar y no estar, por pocos o muchos que
sean los que siguen a Vidal, hay una diferencia sustancial. Y, dice la especie,
esto sería más ostensible en la ciudad cabecera, reducto principal de las
posibilidades electorales 2015, al menos de uno de los postulantes a la
intendencia. ¿Deberá acaso, afianzar expectativas por el lado de Buratovich,
siendo que ese lugar es bastión de Horacio Brión?. Situación compleja.
Más allá de que siempre existen, en mayor proporción,
los agoreros que los optimistas (escépticos hay en todos lados), si de algo -no
por repetido menos cierto- no hay dudas, es de que el oficialismo esta jugando
todas sus fichas (lo hemos dicho casi hasta el hartazgo) a la gestión y no a
las disputas intestinas, si las hubiere. Es cierto que puede preocuparles, a
futuro, la marcha de la economía nacional (hoy con un dólar en 16 pesos
nuestros) y la puja por candidaturas en Nación y provincia y la necesaria toma
de posición en este último caso. Sin embargo, aquel viejo slogan de “obras son
amores”, o el dicho del general, sobre que “mejor que decir es hacer”, el staff
de Patricia está abocado a los hechos y no a las palabras, aún cuando algunos
funcionarios hayan salido al cruce de críticas que la oposición formula, incómoda
porque se les exigiera premura en la resolución de los temas “de agua”
sometidos a consideración del parlamento lugareño.
A las licitaciones de para superar la crisis del
agua se han sumado el anuncio de la que corresponde a la potenciación del
gasoducto del sur, con más los llamados (en postergación, es válido) de las
obras educacionales. Por poco que se lo estime, por el lado de Juan Cousté hubo
inauguración oficial de asfalto y cordón cuneta; y ya está todo en orden (sin
acto en este caso) en materia de agua (planta y red). ¿Pueden pedir algo más
por Algarrobo?.
Y no podía faltar algún corrillo o mentidero propio
de los radicales, muy venidos a menos después de su casi fallida interna por
cargos partidarios (la de casi unos 20 días atrás) en el nivel provincial. Hay
uno, precisamente, que se roza (o un poco más) con la anterior administración
UCR (bien es cierto que asumida tras una suerte de conjunción “K”, en el 2007 y
hasta el 2011). Se refiere a la “addenda” (término que “no nos suena”, para ser
honestos) que pasó por el HCD, para seguir su curso burocrático.
Ocurre que parece ser que el tema durmió, “cajoneado”
sería la forma de definirlo, cuando había unos 300 mil nacionales a recibir por
la comuna. Eso tiene que ver con el programa de instalación de monitoreo
integral de cámaras en el territorio bonaerense, en base al cual, en su
momento, el municipio suscribió un
convenio de cooperación con el Ministerio de Justicia y Seguridad de la
provincia de Buenos Aires.
Con fecha 16 de mayo de 2011, precisamente, se
suscribió una “adeenda”, a ese acuerdo, para agregar una cláusula. Firmaron el entonces
intendente (RM) y quien era ministro del área, doctor Ricardo Casal. Está
reconocido que los elementos, emergentes de aquel convenio, fueron adquiridos
con presupuesto municipal. Sin embargo, por aquel entonces, no se habría
gestionado el pago, por decirlo de una manera entendible; y tampoco se encontró,
en los archivos, la citada addenda. Se pidió a provincia; se recibió; y el trámite
fue al HCD para aprobar el citado instrumento. Eso, obvio, facilitará “recuperar”
aquel importe, no menor.
El interrogante es casi natural: ¿qué operó para que
no se siguiera el curso debido hace unos tres años?. No estaría para nada mal
que alguien lo explicara. Como, también, ¿qué pasó finalmente con la por
momentos muy proclamada “autopista informática del Bicentenario, presentada con
bombos y platillos el 25 de mayo del 2010?. Por ahí, alguna vez, alguien aclara ese pequeño temita,
que generó, también, una inversión comunal.
Y volviendo un poco al momento actual del
radicalismo, pareciera ser que no todas sus flores, aún desde el mejor espíritu
de César Aldunate, en eso de aglutinar fuerzas con perspectiva de futuro. El
presidente distrital de la UCR
ha admitido, y no hay porqué no comentarlo, que apuntarían al 2019 y no a la próxima
elección 2015. Pasándolo en limpio: trabajar para el momento de los hoy “más jóvenes”.
No obstante eso, se sabe de una próxima reunión,
para la cual Aldunate habría cursado ya algunos mensajes de texto, a manera de
anticipo. Alguno se quejó de haber tomado conocimiento sólo por otros, pero
seguramente eso tendrá pronta y fácil solución.
Lo que no se sabe si será tan simple, según algún
corrillo, es el relevo de Néstor Fabián Giambartolomei, en el que se supone
breve período de licencia que deberá tomar por razones de salud (estudios de
los últimos días le dieron tranquilidad en ese aspecto). Cuando “Bartola” tome
ese descanso obligado, habrá que tener en cuenta la “boleta” del 2011. Aparecen
los nombres de Marta Onorato, Germán Biggi, Guillermo Lafitte y Graciela Feijoó,
en el escalonamiento. ¿Entonces, quién?, porque se especula que puede haber
alguna alternativa impensada, según quien ocupe ese escaño.
Seguramente, también, y es lo del cierre, por San
Martín 250 de Médanos deberán pensar en algunas otras cosas. ¿Recuperar
huestes, muy dispersas, quizás?. Reservado para radicales, unos y otros.