Después de tres días de festejo con música, stand, artesanos, elección de la reina y fuegos artificiales, la 46ª. Fiesta Nacional del Ajo tuvo su final merecido. León Greco brindó su música durante casi dos horas e hizo cantar a todo Villarino.
El domingo (18) las actividades comenzaron desde muy temprano, a las 10.15, con el acto protocolar al que asistieron la intendenta, doctora Patricia Cobello; autoridades municipales; instituciones; y público en general.
Primeramente, el presidente de la comisión de festejos y secretario comunal de Gobierno, Luís Mario Antoniuk, se dirigió a los presentes; minutos más tarde se realizó la bendición de los frutos y después de sus palabras, la doctora Cobello dio permiso a que se iniciara el desfile de carrozas e instituciones.
Sobre las 15, comenzaron las actividades y los shows artísticos: demostración de proceso de manufactura del ajo; concurso de cortadores; Gaby, “la voz sensual del tango”; entrega de premios (a carrozas y cortadores de ajo); y la actuación especial del Negro Ferreira.
Antes de que llegue el número central al escenario, se realizó la elección de la soberana: Mercedes Rivadeo fue consagrada como reina nacional del ajo; y también fueron elegidas Cintia Soledad Rodríguez, como primera princesa; y Araceli Dumrauf, como segunda princesa.
Cerca de las 23, cuando la lluvia amenazaba con salir a escena, León Greco llegó al escenario para demostrar que él y sus músicos serían los únicos protagonistas de la noche.
Durante casi dos horas, el artista santafesino cantó temas de su último disco; los históricos; y los que lo llevaron a ser hoy el músico reconocido y popular que es.
Durante la actuación, se proyectaban en las tres pantallas gigantes videos que mostraban una parte de la historia argentina. Fiel a su estilo y firme en sus convicciones, Gieco siempre dejó bien en claro la importancia que tiene saber y conocer nuestra historia como habitantes de esta Nación.
Una vez concluido el repertorio; la intendenta (Patricia) Cobello, subió al escenario para darle un obsequio al artista y reconocerlo como ciudadano ilustre del partido de Villarino.
Finalizada la actuación, Gieco miro al cielo y bromeando dijo “no podemos seguir frenando la lluvia; los chacareros nos van a matar”.
Cerca de la 1 de la mañana (del lunes 19) se apagaron las luces del predio. Fue un fin de semana en el que hubo de todo: mucha gente del partido y de distritos vecinos se acercaron hasta Médanos para disfrutar una propuesta diferente planteada por la comisión de festejos y el municipio de Villarino.
Cerca de la 1 de la mañana (del lunes 19) se apagaron las luces del predio. Fue un fin de semana en el que hubo de todo: mucha gente del partido y de distritos vecinos se acercaron hasta Médanos para disfrutar una propuesta diferente planteada por la comisión de festejos y el municipio de Villarino.
El clima fue un factor fundamental para que todo fuera una “verdadera fiesta nacional”, ya que la lluvia recién llegó minutos más tarde a que todo concluyera.