Un servicio –
transporte escolar - que no empezó junto a las clases.
Refugio en
Mascota (hecho por Vialidad). Sin pauta y sin cobrar. Susana Velásquez y una
rica experiencia. Se fue Valeria Miguel, pero no se sabe quién la reemplaza. “Razzia”
o algo parecido, con clausura incluida. Más comunicación en los paseos públicos.
Sólo un saludo, casi frente a una cámara, pero no de TV. Lo que faltaba: legisladora
y columnista a la vez.
Y sí. A veces, es
bueno cambiar la rutina.
También, en esta
columna, que es un clásico de DIARIO VILLARINO y que –verdad incontrastable –
ha sido y es, por lejos, un espacio periodístico con historia y bien ganado
lugar entre la gente del distrito.
Esto, con lo que
comenzamos, tiene autor válido, como que lo tomamos de la página que, en el
Facebook, tiene la reconocida escuela albergue de Argerich.
El caso, de la
autoría del director de ese establecimiento y dirigido a la comunidad de la
escuela, fue publicado, este martes (10). Esto decía:
“Familias, mañana
miércoles 11 de marzo, comienza el ciclo lectivo 2020 para los alumnos de
segundo a sexto año”.
“Por problemas
ajenos a la institución no se brindará el servicio de transporte escolar
otorgado por el Consejo Escolar”.
“Sí tienen
residencia los alumnos a los que se le confirmó la misma. Los alumnos tendrán
que ingresar y retirarse del establecimiento por sus medios”.
“Cuando se tengan
novedades respecto al servicio de transporte lo comunicaremos por este medio y
a través de los grupos de WhatsApp”.
Esto, que hemos
transcripto, puede ser interpretado como una comunicación más, de estilo.
No lo es, sin
embargo, porque más allá del espíritu informativo que tiene para con las
familias del alumnado, encierra una falencia que no es nueva, para nada. Y que,
por el contrario, es una circunstancia recurrente.
Se repite, a cada
comienzo del ciclo lectivo, con diversas variantes, ninguna de ellas
halagüeñas, para nada.
Ahora, aunque los
ciclos vacacionales se hayan acortado en los últimos tiempos, un par de meses
cuanto menos, ¿no son demasiado tiempo como para que el transporte escolar sea,
cada año, una realidad en el primer día de clases?.
Si el mecanismo
(o el sistema) reconoce plazos, al margen de los cuales el servicio no puede
prestarse, ¿no será hora de cambiar el operativo; achicar plazos; o lo que
fuere, porque sabemos que hay licitaciones de por medio que son exigibles?.
“Los vecinos de
La Mascota ya cuentan con el refugio solicitado hace años. Gracias compañero y
amigo Gustavo Trankels por actuar de manera rápida en este compromiso
que has asumido al frente de Vialidad”.
Este posteo, de
Ignacio Dallavía, nos sorprendió. Hasta que nos dimos cuenta de cómo era.
En realidad, al
verlo, se nos escapó “una buena, entre tantas que no lo son”, pero lo
importante es que se haya hecho y no tanto quién lo hizo posible. Está y eso es
bueno…
No lo es tanto,
eso sí, comprobar, como ocurrió este miércoles (11), que pasa el tiempo y todo
está como era entonces (desde comienzos de diciembre 2019).
Desde ese
momento, el municipio - ¡bah!, el intendente, que sólo entiende sus razones y
nunca la de los demás – canceló, como en años anteriores de su gestión de
gobierno, la pauta que, a manera de exigua compensación, se “concede”, a
algunos medios locales; y mucho más a los que “son de afuera”, como alguno que
no lo es ni siquiera en su propia ciudad (Bahía Blanca).
Ahora, se nos
indicó que una factura de DIARIO VILLARINO, que tuvo que ser repetida por un
error (uno más) de la oficina de Compras, “duerme el sueño de los justos” en el
despacho del Lord Mayor. Su valor en pesos, obvio, está tan depreciado que
debería dar vergüenza lo que ocurre.
Fue parte
importante, es cierto, en la ejecución de obras que el municipio terminó
(algunas que habían quedado inconclusas). Pero ya dejó el cargo. No debemos
sino reconocer la gestión de la ingeniera Valeria Miguel, que ha sido secretaria
de Obras Públicas.
Como en otras
ocasiones, el ejecutivo no dijo quién la reemplaza en el cargo. ¿La arquitecta
Manuela Bevilacqua, acaso?. No entendemos porqué ignota razón no se lo dice
oficialmente. ¿Por el cierto grado de nepotismo que campea por allí o algo
parecido?.
Esta es una
buena, porque siempre es importante la participación en otros niveles.
Susana Velásquez,
edil incorporada hace unos tres meses al Honorable Concejo Deliberante,
ocupando una banca en el bloque del Frente de Todos, estuvo, la semana
anterior, en un encuentro nacional de “concejalas”, en Buenos Aires.

A propósito del
día de comisiones. Alcanzamos a escuchar que se “debatía”, o intercambiaban
opiniones, sobre servicios de comunicación (internet, whatsapp o cosas por el
estilo) en las plazas de los pueblos; los paseos públicos, si se quiere
denominarlos más abiertamente. Habría sido casi el único tema. Nadie quiso
hablar de eso (¿…?).
Nos encontramos,
ya yéndonos de Médanos, con Walter Fabián Atala, director de la escuela
albergue de Argerich, y con Juan Cruz Vidal (edil MC) quienes dialogaban, sobre
el mediodía, sobre la curva casi de la salida a la ruta. Hay, en el lugar,
alguna cámara, que permite observar el tránsito (¿también el estacionamiento?),
desde el Centro de Monitoreo. Nos quedó una duda, ¿no se puede parar allí?.
Pareciera ser, y
eso nos generó otro interrogante, que hubo “razzia” (si se puede utilizar ese
término, resabio de otros tiempos, afines al “no electo 2005”) en la noche del
sábado que pasó (7) e incluso alguna clausura de local. ¿La “disco” tradicional
del pueblo?.
Nos quedamos con
la intriga, eso sí, porque hace rato que nuestros contactos con el “ejecutivo”
dejaron de ser viables sin demasiado “tramiteo”. Cosa de tiempos que parecen
haber cambiado. ¿O no?.
Casi se nos
olvidaba. Tercer mes del año, el que va corriendo. Y el municipio sigue sin dar
señales de vida con eso que se llama pauta y que es (o pretende serlo, para ser
más reales) una suerte de compensación, muy limitada desde hace algo más de 4
años, por servicios de comunicación a la comunidad, hartamente cumplidos. Dicen
que, aunque no dé la cara, anda con eso alguien a quien rotulan “picasesos”.
Lo que se refiere
a eso de la pauta, especulan algunos, tendría un poco que ver con la baja
coparticipación que el municipio está recibiendo, un poco como consecuencia,
claro está, de un decaimiento en la recaudación de tributos, algo que podría
entenderse como razonable, pero si hubiera un cierto grado de sinceramiento por
parte del intendente, que hace rato no hace uso de eso que llaman conferencia
de prensa, después que fracasara la última, allá por el final del año anterior,
aunque si (antes de eso) concediera una entrevista a un medio de Pedro Luro,
que goza de ciertos privilegios a la hora de ser anoticiado de alguna novedad
municipal, que le llega antes de su envío a “todos por igual”.
De todas formas,
y ya que obligadamente debemos “despacharnos” sobre tratos discriminatorios
respecto de ciertos medios (el nuestro mucho más que otros; y damos fe que es
así), la novedad última (aunque nunca se sabe) es que la diputada provincial
(hija del intendente) no ha escatimado convertirse en ¿columnista? De un medio
apenas bahiense, sobre el que su padre ha cantado loas en algunos actos
oficiales.
Ahora nos “desayunamos”,
de alguna manera hay que decirlo, que hace notas para exaltar los beneficios
del emprendedorismo, que ha sido su “caballito de batalla” por dos años. Claro,
que se sepa, no hay demasiados logros para resaltar.
Por alguna razón,
no entendimos bien cuál, está transitoriamente cerrado el refugio de
motoviajeros de Argerich. El coronavirus no perdona. Y eso tiene su razón de
ser, ya que suele ser visitado por gente que llega desde los puntos más
distantes y es una medida preventiva inobjetable.
La del estribo,
aunque falte una eternidad: empiezan a “circular” (no es otra cosa) nombres de
candidateables para el ¡2023!, no ya la elección de segundo término. Extraño,
aunque es un signo muy anticipado de disconformidad. Impensado para otros
tiempos.
Stop, ¿para qué
más?. En el retorno de esta clásica columna, hubo de todo, como en botica.