Estuvimos, este
martes (15), en Médanos.
Llegamos lo
suficientemente temprano. Eso nos permitió una escala, al ingresar, para
saludar a Miguel Raúl Novo, a quien no habíamos visto en lo que va del primer
mes y medio de este 2022 e incluso en el final del año anterior, después de las
ya lejanas elecciones de noviembre pasado.
Tan es así, que
recién ahora supimos que prepara el cierre de su comercio, después de unas tres
décadas. Suelen ocurrir “esas cosas”, como un hecho propio de esta época. ¿Sí?.
Cuando ingresamos
al piso alto de Moreno 41, donde funciona el Concejo Deliberante, era la hora
fijada para el comienzo de la sesión extraordinaria. Según el orden del día,
las 10 AM. En la práctica, nada que ver.
Por esos
momentos, y largamente más, observamos el ir y venir de los ediles, como si
estuvieran tratando de evitar la tercera guerra mundial, que mantiene en vilo a
la población de Ucrania; y que es una lucha de los indeseables de EE.UU. y
Rusia, como siempre a contramano de lo positivo.
Pero no, al parecer,
deducción de poca imaginación nuestra a esta altura, la cosa era por el tema
contenido en el asunto 13.359, que tiene que ver con la solicitud de
autorización, pedida por el Departamento Ejecutivo, para adquirir un terreo,
con destino al acueducto Sauce Chico – Médanos, o lo que es mejor, para la
construcción de la planta potabilizadora, imprescindible para permitir, luego,
el abastecimiento de agua a la ciudad cabecera del distrito.
Las dilaciones
nos dieron que pensar, una vez más, por si hiciera falta, en la nula incidencia
que tiene el espacio de tiempo utilizado (¿o perdido?) en la no más que teórica
“labor parlamentaria”, durante la cual se consumen mates, café, agua y no mucho
más, mientras se discurre vaya a saber sobre qué cuestión.
Y decimos esto
porque, a manera de ejemplo, lo del martes
(hablamos del 15), insumió casi una hora y media (87 minutos en rigor)
hasta que la presidenta decidió abrir la sesión extraordinaria propiamente
dicha. Eran las 11.27.
Luego menudearon
los cuartos intermedios, breves (es cierto), para dar dictamen a algunos de los
asuntos que fijaba el orden del día.
La dilación mayor se produjo con el ya mencionada asunto 13.359, hasta que la votación nominal arrojó el resultado de 6 adhesiones (de la primera minoría, la de Acción por Villarino) y 10 posturas negativas (las de las bancadas de Juntos y del Frente de Todos).
Sobre ese tema,
hablamos con los ediles Carolina Aldunate y Mauro Damián Chiarellotto, de
Juntos, a quienes encontramos en el restaurante La Ruta (el de Mary), a la hora de un tardío almuerzo.
Sabemos sí, y no porque se nos haya informado como sería deseable, que hubo, este miércoles (16), una reunión sobre el caso del lote que debe adquirirse, con participación –para ilustrar a los concejales- de la geóloga Eliana Pereyra Fernández y el investigador Pablo Petracci.
Conocemos, finalmente que, este jueves (17), desde las 19, volvía a reunirse el HCD y habría entonces definición en torno al futuro de la compra del inmueble para la planta potabilizadora del Sauce Chico. Claro, si los concejales no deciden otra cosa.
El audio:
https://ar.ivoox.com/es/lo-dicen-aldunate-chiarellotto_md_82409044_1.mp3?t=laqjoJameKOppA..