Ojalá se piense en un distrito mejor.
No cambiamos, así porque sí, nuestros puntos de vista,
aunque deseemos, fervientemente, que algunas cosas se modifiquen, de tanto
“machacar”, desde los “corrillos y mentideros” de estos tiempos; o lo que hemos
dicho y hecho por décadas, en el diario de papel o en espacios de radio que
supimos producir largamente.
Lamentablemente cierto es que nuestra prédica haya caído en
“saco roto”, hace muho; no hce tanto; y hace poco.
Leíamos, esta misma tarde, la columna de Luciana Geuna,
relatando episodios co-protagonizados por el presidente y la vice de la Nación.
Dan pena y bronca a la vez. Porque esa tempestuosa relación del inútil y la
chorra se ha repetido hasta el hartazgo, en tanto y en cuanto, por nada menos
que 4 años, que están llegando a su término, uno y otra “jugaron” con el
destino del país y sus gentes.
Pero hay algo mucho peor: nadie hizo absolutamente nada para
evitarlo; y frenar la destrucción nacional en la que ambos – mamarrachos al
mango – estuvieron y están ocupados.
Ya es tarde para todo…
Nos ha causado no poca gracia el video que los verdes
lugareños subieron a las redes en las últimas horas, antes de la veda.
Carlos
José Ceferino Bevilacqua, el “Bevi”, deleitó enseñando a cortar boletas. Unas
cuántas; ¿todas?, para insertar la suya local, que lo incluye como postulante a
un tercer período consecutivo en el gobierno municipal del “Pago Chico”.
Contra lo que puede suponerse, hilando fino (o no tanto), esa actitud y esa mecánica ha significado una cierta cuota de valoración de las líneas opositoras que el vecinalismo gobernante tiene frente suyo.
Si no las tuviera en cuenta, ¿para qué enseñar a cortar boleta?.
Pero no es en eso que queremos poner énfasis, sino en puntos de vista que hemos señalado hasta el hartazgo en tiempos cercanos: ¿puede alentarse acaso el voto para quienes, no hace mucho, se han manifestado – desde el ámbito legislativo – esquivos a la libertad de expresión. La presidenta del HCD, una de ellas, ahora embarcada en una postulación para ser intendenta.
Esto es,
Susana Velásquez, que lidera la lista de La Cámpora, tras el virtual quiebre
del PJ convencional y la ausencia de algunos dirigentes que hasta hace poco
eran líderes de esa fracción política tradicional en el distrito.
¿Encarna esa papeleta la perspectiva de un mejor futuro tras las primarias del venidero
domingo 13?. Por supuesto que no.
Y más allá, ¿qué?. Interna propiamente dicha será la de Juntos, con tres espacios compitiendo, encabezados por Carolina Aldunate, Juan Cruz Vidal y Mauro Damián Chiarellotto.
Dicen algunos observadores (no somos
nosotros afectos ni mucho menos a las encuestas) que las tres listas, unidas,
podrían superar los votos del oficialismo verde cuando se haga el escrutinio
pasadas las 18 del próximo domingo.
No se sabe, por último, absolutamente nada, de las listas
locales de la izquierda (que nunca llega a nada) y del enigmático Milei, que
tiene su nómina distrital de la que no hay noticias de ninguna índole. ¿Para
qué amagan?.
Como para muestra basta un botón, y no es la primera vez que lo decimos, están las obras, que en los últimos 8 años le han mejorado el nivel de vida a la ciudadanía de Villarino.
No pocas ya hechas y favoreciendo el
disfrute; otras en gestación (camino Médanos-Ombucta; pileta climatizada de
natación en Médanos; hospital modular en Algarrobo, a pasos de su terminación);
y las no pocas que no se ven y ni se verán, pero que encierran en sí mismas la
posibilidad de un mejor futuro (agua; cloacas; y también cordón cuneta;
pavimento).
Con una mano en el corazón y después de años y períodos de
gobierno sin obras fundamentales, ¿hace falta decir a quién votar?.
El domingo (13), las urnas esperan, de 8 a 18. Ojalá sea una elección pensada por todos para un Villarino mejor.