sábado, 4 de julio de 2009

ABRUPTO CAMBIO: ANDREA CICCIOLI PRESIDE EL CONCEJO DELIBERANTE

Fue revocada la designación de Carlos Bevilacqua.

Nunca está dicha la última palabra. En política, mucho menos. Quedó demostrado, este viernes (3), en el Honorable Concejo Deliberante de Villarino.

Según lo revelan los informes conocidos, fue revocada la titularidad ejercida en ese cuerpo parlamentario por el doctor Carlos José Ceferino Bevilacqua, que el 27 de octubre de 2007 acompañó, como primer postulante a una banca, al triunfante intendente Raúl Roberto Mujica.

La “concertación plural” (mencionada con minúscula, porque desapareció casi simultáneamente con los comicios de aquel entonces) dejó de tener sentido, a nivel municipal, a poco de andar en el camino la nueva conformación de los poderes (ejecutivo y legislativo) de Villarino.

Incompresiblemente, el esquema que permitió la victoria 2007 se quebró de inmediato. Y más mucho más difícil de entender fue que algunos funcionarios (cuyo ingreso al gabinete fue producto del acuerdo entre Mujica y Bevilacqua) permanecieran en sus cargos cuando las distancias entre un sector y otro eran manifiestamente abismales.

Llegó el intento de Bevilacqua por revalidar su escaño, presentándose a la puja electoral del pasado domingo 28 con la boleta de Unión-Pro; y se produjo, entonces sí, el alejamiento de Diego Alessiani y Carina Guette, caras visibles, en Moreno 41 de Médanos, de un entendimiento político que ya no era tal.

Los números de las legislativas no dejaron margen para el error: quiérase o no, Mujica consolidó su liderazgo (sin competir, salvo a través de sus acompañantes del Acuerdo Cívico y Social), sin arriesgar con una postura similar (¿deseable?) a la de Bevilacqua. Es decir, no puso en riesgo su mandato hasta el 2011. No dirimió fuerzas. Y ganó.

Seguramente (aunque a seguro, como dicen, lo llevaron preso hace mucho y no consiguió aprovechar algún resquicio de los que suele haber) nadie esperó que se desencadenara lo que ocurrió, palpablemente, hace pocas horas.

El HCD, históricamente acostumbrado a reuniones quincenales y no mucho más (por las distancias entre los pueblos, desde los que llegan a Médanos los ediles), apresuró el paso y materializó el objetivo de la bancada de Integración y Movilidad Social (IMS), diligente a la hora de hacerse de la presidencia del cuerpo.

¡Cuidado!. No hay en esta actitud sino la decisión de apelar a un recurso válido, sin aguardar a que, en la práctica, se de, desde el 10 de diciembre, la nueva conformación del cuerpo parlamentario lugareño. En definitiva, y en eso hay que coincidir, no se hizo sino ejercer la alternativa que da el número. Esto es, votar el relevo y a otra cosa.

De esta manera, Andrea Ciccioli se convirtió en la flamante presidenta del HCD de Villarino, al que accedió alguna vez, desde su condición de suplente, en el 2005, razón por la cual su mandato finalizará en diciembre de este año. En su momento, fue designada como vicepresidenta primera, lo que le permitió ahora acceder a la titularidad del legislativo distrital.

La mesa ejecutiva del cuerpo (en el que Bevilacqua ha pasado a ocupar su banca, legitimada en los recientes comicios, hasta al 2013) reconocerá la presencia de Luis Antoniuk, ahora como vice primero; y de Graciela Feijóo (electa en el 2007) como vicepresidenta segunda.

Antes del cambio, Bevilacqua aludió a su negativa a renunciar; explicó los motivos que lo distancian de la gestión de gobierno; y señaló que la decisión de desplazarlo de la presidencia está fundada en que el oficialismo perdió una de las cuatro bancas que ponía en juego en los comicios del 28.

El edil, según indican los informes conocidos, preguntó si el cambio de presidente era un asunto de urgencia e interés público.

A la hora de la votación, los concejales del IMS votaron a favor de la revocatoria, mientras que los ediles Walter Carrino, Abel Rap, Patricia Cobello y Antoniuk lo hicieron por la negativa. Hubo dos abstenciones: las de Carmen Morete y Edgardo Montes de Oca.

¿Cuál es el futuro?, es un buen interrogante que surge tras lo ocurrido este viernes (3), en el piso alto del Palacio Municipal de Villarino. Hay sí un pequeño detalle a tener en cuenta: el relevo natural del intendente gobernante es el primer concejal de la lista triunfante en el 2007. Algo que poco tiene que ver (nada en rigor) con la presidencia del HCD.

A nadie escapa que, así como se han dado las cosas, el cuerpo deliberativo puede pasar a tener, en la historia próxima, un inusual protagonismo.

A manera de epílogo sobre el tema: se conoció alguna expresión crítica en torno a lo sucedido y a los “pases” registrados en lo que va de los tres últimos años (2006 en adelante). Suponemos (en eso nunca se sabe) que la mejor contribución sería un prudente silencio. Ni el ejecutivo ni el parlamento lugareño necesitan, a esta altura, quien les guíe sus cursos de acción.

No hay comentarios:

Publicar un comentario