Escenas íntimas
del nuevo poder: Milei político, Caputo ansioso y el apoyo de Mauricio Macri.
22 de diciembre.
¡Hola!.
La intensidad
política del gobierno de Javier Milei llegó para quedarse.
Diez días de vértigo
y manejo total de la agenda de nuestras conversaciones.
La Casa Rosada tiene un
movimiento inédito en los últimos cuatro años. El presidente llega primero a
las 08.00 y se va a las 21.00. Lo mismo los que lo acompañan.
En sólo 48 horas,
viste de todo: la implementación de un control antipiquete de magnitudes
inéditas; el anuncio por cadena nacional de un DNU que cambia casi
todas las reglas económicas de la Argentina; cacerolazos; y anuncios que
vendrán.
Primeras escenas de la era Milei.
Acá te cuento
todo lo que sé.
Javier Milei
político.
Es martes en la
Casa Rosada. Terminó hace un rato el encuentro con los
gobernadores en el Salón Eva Perón, en una mesa enorme encabezada por el presidente, que decidió ser el anfitrión y el único interlocutor en una
conversación de dos horas y media. Ya hubo conferencia de prensa del ministro
del Interior, Guillermo Francos; todavía quedan dirigentes provinciales
caminando por el Patio de las Palmeras y Javier Milei está en su despacho
recibiendo a su círculo chico con una sonrisa: “¿Hice bien de político, no?”.
Habla de lo que
acaba de pasar en la reunión con los gobernadores pero también de lo que está
por venir: una jugada política descomunal a partir de un Decreto de
Necesidad y Urgencia y un paquete de leyes que se mandará al Congreso de
la Nación en sesiones extraordinarias y que diseñan, todo junto, el plan de
cambios estructurales que tiene en su mente. Y que tiene consecuencias
imprevisibles. “Un shock de libertad”, lo tituló Milei.
Luis Caputo
ansioso.
“¿Quedó que
aceptan lo de Ganancias?”, el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo está
intrigado y ansioso llamando desde su despacho a la Casa Rosada. Habían
acordado que no cruzara la calle para la reunión y necesita saber el final de
la historia.
Los gobernadores
escucharon de Milei que si ellos buscan recuperar su plata de coparticipación
de Ganancias, sólo les queda reponer el impuesto y que él está dispuesto a
pagar el costo político. Pero tienen que mandar a los suyos a votarlo. “¿Les
dijo eso?”, apura el ministro. “¿Y ellos que respondieron?”. En su estructura
de prioridades, el déficit cero es una urgencia que naturalmente comparte con
el presidente.
Durante toda la
tarde del martes y el miércoles, hubo idas y vueltas de detalles que cruzan
intereses y estrategia política: ¿Qué queda en el decreto?. ¿Qué va en formato
de ley?.
La mesa de esas
decisiones tiene al jefe de Gabinete, Nicolás Posse, a su ideólogo principal,
Federico Sturzenegger, al procurador Rodolfo Barra y al secretario de Legal y
Técnica, Javier Herrera Bravo en las observaciones jurídicas, y a un
funcionario de perfil bajo pero de incidencia y afinidad ideológica total con
Milei: es Eduardo Rodríguez Chirillo, secretario de Energía pero también coordinador
de todo el entramado de leyes que enviarán al Congreso de la Nación.
Abogado de la
UCA, especialista en privatización de empresas públicas, fue contratado por el
gobierno de José María Aznar para su plan de privatización y por ese trabajo lo
condecoraron con la nacionalidad española. El miércoles a la tarde, mientras
Patricia Bullrich, daba una conferencia de prensa sobre el resultado del
protocolo antipiquete, Chirillo llegó a Gobierno en el mismo momento que Paolo
Rocca, presidente del Grupo Techint, que ayer firmó el comunicado de la
Asociación de Entidades Empresarias (AEA) apoyando las primeras medidas de
Javier Milei.
Máximo Kirchner a
la bicameral de DNU.
Hay una decisión
tomada en estas horas: ya no hay posibilidad de convocar a sesiones
extraordinarias antes de la Navidad así que eso sucederá la semana que viene.
Hay una carrera ya perdida por lograr la aprobación de cambios impositivos
antes de fin de año -sobre todo Bienes Personales- para que empiece a regir en
2024. Ya no lo lograrán.
El impuesto a las
Ganancias, que obsesiona a Caputo, irá por separado, igual que la movilidad
jubilatoria, pero todavía se está puliendo el paquete central de reformas.
La integración de
la comisión bicameral por los DNU está llena de datos políticos: Máximo
Kirchner se anotó entre los representantes de su bloque en ese órgano de 16
integrantes entre diputados y senadores. Una vez formada, el jefe de Gabinete
tiene diez días para mandar el DNU para su validación y a su vez hay diez días
para que lo aprueben o rechacen.
Y debería ir al
recinto directamente si no se cumplen esos requisitos pero el Congreso tiene
amplia experiencia en no tratarlo. Alberto Fernández lo sabe perfectamente. Y
lo que no se trata, queda vigente. En sólo 24 horas, sorprendió cómo la
oposición pasó del estupor a otras formas: el PRO, que empezó el día bastante
unificado en la idea de que son normas que en su mayoría deberían discutirse en
el Parlamento, lo terminó con la división que trae desde la campaña: los más
duros ya emitieron señales de apoyo.
Macri y Milei,
otra vez juntos.
Mauricio Macri
volaba ayer 27 horas de vuelta a la Argentina desde Arabia Saudita. Siguió
personalmente el texto que subió a su cuenta de X apoyando las decisiones
de Milei. Hubo en estos días muchos chats de ida y vuelta entre los dos. El
expresidente ve una oportunidad que él no tuvo cuando arrancó su gobierno con
DNUs que tuvo que abandonar para mandarlos como proyecto de ley. “Con déficit y
este sistema mafioso, vamos a la hiper. Hay que generar un shock de
expectativas”, sostiene. Él cree que en este contexto, el Congreso es un
pantano que hay que evitar. Se está abriendo una discusión muy profunda sobre
la república. El radicalismo y Martín Lousteau en particular sostendrán esa
bandera.
La reacción
social por el DNU no oscureció los pensamientos del presidente. Todo lo
contrario. Su decisión es defenderlo personalmente. Por eso, dio una entrevista
de una hora la mañana siguiente a su publicación y por eso cenará con Mirtha Legrand
el sábado a la noche. Mientras tanto, ese decreto está pudiendo lo que no había
pasado en cuatro años: la CGT juntó a sus integrantes principales en una
reunión en la UOCRA, de Gerardo Martínez. No hay paro pero hay
movilización y la semana que viene volverá a ponerse en práctica el
protocolo antipiquete. Hay muchas preguntas sin respuesta sobre cómo
evolucionarán las manifestaciones en la calle. Ayer en Córdoba, la policía
intervino con violencia.
Milei sabe que le
espera una fuerte judicialización del DNU. En su discusión parlamentaria, ese
decreto con “las bases para la reestructuración de la economía argentina” se
debería aprobar o rechazar en su totalidad. La pelea real se juega en los
tribunales donde las presentaciones serán por cada modificación o derogación de
las leyes. Se reía un abogado experto del peronismo ayer por dos detalles: “Que
un presidente en cadena nacional diga que se modifica una norma para que pueda
entrar una empresa en particular (por Starlink de Elon Musk) a nuestro mercado,
es delirante”.
El otro es más
naif: escribieron “nefasta ley de alquileres” en el DNU. Dice no recordar jamás
que califiquen una ley en un decreto. Cositas entre las 83 páginas de alto
voltaje.
La Navidad de
Cristina Kirchner.
Cristina Kirchner
siguió desde su casa en Buenos Aires la conferencia de prensa del presidente.
Es abogada pero chateaba buscando opiniones.
Ella es la
artífice de algunas modificaciones de la normativa para los DNU que ahora sólo
ayudan a Milei: la que obliga a que sean las dos cámaras las que lo rechacen
para quitarle validez, y la que decía que si no se trataba en un año, se caía
el decreto.
Todas delicias
para los planes del nuevo gobierno. Pasará Navidad en la ciudad. Estas últimas
dos semanas estuvo más activa que nunca. No quiere perder centralidad y nadie
sabe quién liderará el peronismo. Hay pocos vacíos más hondos que ese rol en
este momento.
Esto es todo para
esta semana.
El viernes que
viene me vuelvo a contactar con toda la info que vaya recolectando a lo largo
de la semana.
¡Que pases una muy
feliz Navidad!.